Elocuente: en cuanto a una persona, podemos decir que dicha persona mediante su forma de hablar o escribir logra conmover o persuadir a los demás.
Erudita: es una persona que conoce o tiene conocimiento acerca de varias ciencias, artes u otras materias. Es una persona instruida en varias temáticas de distintas ciencias.
Morfología: rasgos físicos de alguna cosa o persona que puede experimentar modificaciones o transformaciones.
Inherente: una cosa es inherente, cuando está unido a algo y no se puede separar de ello.
Postrero: se refiere a lo último de algo, ya sea de una lista, serie, etc. También la parte más retirada de un lugar, o de algo en particular, como la culminación de una cultura.
Estirpe: en términos generales se refiere a una sucesión hereditaria, es decir, es la descendencia que se deja durante el transcurso de los tiempos, ya sean costumbres, cultura, educación, etc.
Inmanente: es el estar inherente a un algo, es decir, que está unido de forma inseparable a lo que es en sí su propia esencia, cosa que por ejemplo en el caso de la Paideia es la familia o comunidad que están inherentes a la educación.
Cierne: es un algo que está pegado a los principios o costumbres determinadas, luchan por ser mejor cada vez e irse desarrollando pero siempre ligado a sus principios, eso sí, le falta mucho para ser perfecto, ya que siempre existen cambios para desarrollarse cada vez más. Por ejemplo en el caso de la educación, es ésta quien está ligada a sus principios que son la familia y comunidad, las cuales le ponen las reglas.
Antropocentrismo: es la doctrina que hace al ser humano medida de todas las cosas, su naturaleza y bienestar. Son los principios de juicio según los que deben evaluarse hacia los demás seres y la organización del mundo en su conjunto.
Humanidad: son el conjunto de disciplinas relacionadas con el conocimiento humano y la cultura.
Humanismo: sentimiento individual y colectivo de una civilización en la que destaca de manera prominente la admiración, exaltación y elogio de la figura humana y el hombre.
Paideia: (“Educación” o Formación”), era para los antiguos griegos, la base de educación que dotaba a los hombres (no mujeres) de un carácter verdaderamente humano. Como tal, no incluía habilidades manuales o erudición en temas específicos, que eran considerados mecánicos e indignos de un ciudadano.
La Paideia se centraba en los elementos de la formación que harían del individuo una persona apta para ejercer sus deberes cívicos.
